domingo, 16 de agosto de 2015

ENTRE PUCHEROS --VI--

He leído en no sé dónde,(#) que el guión de la película Pretty Woman, aquella que fue un éxito de taquilla, y que han pasado doscientas y una vez por televisión, no era el original. El  guión inicial fue padeciendo una especie de metamorfosis hasta convertirlo, lo que era casi perverso, en algo candoroso como hemos visto todos los que tengamos más de veinticinco años. (no nos engañemos, solo aquel que haya pasado los últimos 25 años en una isla desierta puede decir que no la ha visto. ¡¡Y aún así!!)
El guión original no tenia ese final feliz azucarado. Ella era maleducada malhablada y una drogadicta que lo que ganaba con su oficio, lo gastaba en droga. Y él era un millonetis pedante mal educado, alcohólico que no puede beber porque tiene el hígado molido.


Y algo parecido, guardando las distancias, le ha pasado a esta reseña. Tenía ya el arquetipo de lo que pretendía expresar, cuando la crítica ha sido muy tajante y no me ha dejado desarrollar la idea, así que he decidido convertirla en la receta de:
COSTILLAS DE CERDO CON CEBOLLAS AL VINO
Había comprado hace unos días unas costillas de cerdo.
El carnicero las troceó como yo le pedí, y las guarde en el congelador para una oportunidad como ésta, que desmoralizado por la crítica tenía que encontrar en donde expresar mi aptitud creativa.
--El día anterior saque una tira que pesaba 300 gramos, para descongelar.
--El día de autos, en un bol pequeño mezclé zumo de limón (medio limón) con aceite, pimienta, sal y un toque de romero. Y en esta mixtura bañé las costillas que había troceado una a una.
--En una sartén puse a calentar una cucharada de aceite e incorporé para rehogar una cebolla pelada y cortada en juliana, y un buen chorreón de vino blanco. Una vez rehogada reserve.
--Puse a calentar una plancha, y cuando estaba caliente le puse finas tiras de tocino blanco para que se derritieran procurando quedara toda la plancha cubierta de este grasa.
--Una vez bien caliente la plancha y cubierta conel aceite del tocino, puse la costilla por el lado de la carne, dándole rápidamente la vuelta para que quedara sobre el hueso, y bajando el fuego a 3 de 6.
--Durante el tiempo de asado le rociaba con el resto de la mixtura. Una vez asado puse en la fuente para servir añadiéndole la cebolla rehogada.
Y nada más a mi me gusto mucho solo un pequeño fallo y es que yo le puse demasiado limón por eso detallo “medio limón”
Ingredientes: 300 g. de costillas de cerdo. -- Una Cebolla. -- Medio limón. – Aceite. – Pimienta. – Sal. – Un poquito de romero --Vino blanco.

(#)No estoy seguro  pero creo  que fue en una revista magazine suplemento dominical del periódico. 
 
enlaces
propiedades del romero

1 comentario:

Anónimo dijo...

pintaza